El televisor se ha convertido desde hace ya varias décadas en un elemento imprescindible en prácticamente cualquier hogar: gracias a él nos mantenemos informados, nos entretenemos y, no es ningún secreto, tenemos un murmullo de fondo que incita a la conversación cuando nos reunimos todos (siempre que su volumen no esté muy alto y no nos interese demasiado lo que se emite).
Por eso precisamente es también uno de los electrodomésticos que más energía consume en el hogar: porque se pasa gran parte del día en marcha.

Muchas personas acostumbran a ver la televisión mientras desayunan antes de irse al trabajo. Luego, si alguno de los miembros del hogar se queda en casa durante la mañana realizando los quehaceres domésticos, el televisor suele estar encendido también acompañando estas labores. Más tarde, durante la comida de mediodía, volvemos a poner la tele para ver las noticias, y por la tarde los niños se sientan frente a ella para ver su programa de animación favorito mientras meriendan. Y finalmente, a la hora de cenar sintonizamos nuestro programa nocturno de entrevistas o alguna película para despedir el día con una sesión cinéfila. En definitiva, nuestro televisor trabaja de sol a sol sin quejarse, pero a cambio de un consumo energético nada desdeñable que finalmente se traduce en un incremento de la factura de la luz a final de mes.

Además, los televisores cuentan con el modo de standby, que mantiene al aparato en estado de reposo a la espera de que lo volvamos en poner en marcha, pero si n apagarlo del todo. Ello, unido a la pequeña bombilla de LED encendida que nos indica que está en este estado, incrementa más aún el consumo.

Por eso vamos a ver unos sencillos consejos para que ahorres en el consumo de tu televisor:

• Tipo de tecnología. De todos los modelos que puedes encontrar en el mercado, los televisores de LED son los que menos energía consumen. Esta tecnología te garantizará un menor consumo energético.

• Standby. Como te hemos comentado antes, este modo sigue consumiendo electricidad aunque la tele parezca apagada, así que si quieres ahorrar apágala del todo. Generalmente lo conseguirás pulsando el botón de apagado del propio televisor. Comprobarás que el LED indicativo de standby se apaga. Existen televisores que te permiten desactivar este modo desde las opciones de configuración del televisor, así que si el tuyo dispone de esta opción úsala y apagarás tu tele del todo aunque lo hagas desde el mando a distancia.

• Pulgadas. Es algo de sentido común, pero a veces no reparamos en ello: a mayor número de pulgadas, mayor consumo. Por eso, cuando vayas a comprar un televisor escoge bien su tamaño en función del espacio y dimensiones de la estancia donde vayas a colocarlo. A veces escogemos televisores más grandes de lo que necesitamos realmente.

• La tele, solo cuando apetezca de verdad. A veces ponemos en marcha el televisor cuando realmente no nos hace falta, como por ejemplo en las comidas y cenas familiares. ¿Por qué no hablar todos juntos de nuestros temas y darle un respiro a la tele? Ahorraremos energía a la vez que reforzamos nuestras relaciones comunicándonos entre nosotros.